EVIDENTEMENTE...

Evidentemente cada uno debe construir sus propios sueños para convertirlos en realidad porque,

de lo contrario, son pura evanescencia 

y si yo tengo que apostar por ellos a costa que me digan tonto...

Lo prefiero antes que ser un listo que no los vive porque los obvia o los rechaza expresamente.

Ahí se comienza a morir y antes que yo,

lo han expresado otras mentes más lúcidas que la mía.

Vamos, que la vida es más simple de lo que parece.